
Se siente el frío, otra vez. Tanto tiempo buscando abrigo en vano para descubrir que no era lo que necesitaba. Yo no necesito tu abrigo, no más. Ya no eres lo que solías ser, y no te atreves a mencionar qué eras en realidad. Puedo aceptar que es una etapa de cambios, porque yo también sufro por eso, pero dentro de todas las posibilidades, una es la de quedarnos juntas, y cambiar juntas; poder aceptar nuestros cambios, y lograr mantenernos unidas. Lamentablemente debí descubrir y también aceptar, que decidiste tomar un camino distinto del mío, que no te interesa ya mi compañía, que otros te cuidan como siempre intenté hacerlo yo. Que mi calor ya no te abriga y que nos tornamos incompatibles. Somos diferentes el día de hoy, pero no cabe duda que el proceso de cambio lo llevamos a cabo juntas, y ese es mi mejor recuerdo. Me llevo conmigo la satisfacción de saber que generé algo completamente real y motivante en tu piel, que no fui una cicatriz más, ni una piedra más en tu camino. Que de una forma u otra tomé tu mano para llevarte hacia adelante, conmigo. A pesar de que hayamos bifurcado nuestra existencia.
Comprendo ahora que durante la vida, se conocen personas que ayudan y personas que destruyen, otras que no hacen ninguna de las dos cosas y se van por donde vinieron, sin generar huellas en el camino de mi maduración. Pero quizá nunca llegue a aceptar qué tan profundas son tus huellas, porque en cada acción que llevo a cabo, esas pisadas que imprimiste en mí, me ayudan y me contienen, me tranquilizan y me brindan esperanza. Aunque ya no tenga tu mano como antes, se que camino contigo al lado. Que lo que fuiste para mí, habrá marcado gran parte de mi ser, y de mi vida, porque mis mejores años, los compartí contigo, y no lo niego, los disfruté lo mejor que pude. Siempre tendré entre mis manos y cerca del pecho ese recuerdo de tí, que aún me genera satisfacción y paz. Mi cariño para tí y mis mejores deseos. Que la vida te sonría así como me sonrió a mí el día que te conocí. ♥
Comprendo ahora que durante la vida, se conocen personas que ayudan y personas que destruyen, otras que no hacen ninguna de las dos cosas y se van por donde vinieron, sin generar huellas en el camino de mi maduración. Pero quizá nunca llegue a aceptar qué tan profundas son tus huellas, porque en cada acción que llevo a cabo, esas pisadas que imprimiste en mí, me ayudan y me contienen, me tranquilizan y me brindan esperanza. Aunque ya no tenga tu mano como antes, se que camino contigo al lado. Que lo que fuiste para mí, habrá marcado gran parte de mi ser, y de mi vida, porque mis mejores años, los compartí contigo, y no lo niego, los disfruté lo mejor que pude. Siempre tendré entre mis manos y cerca del pecho ese recuerdo de tí, que aún me genera satisfacción y paz. Mi cariño para tí y mis mejores deseos. Que la vida te sonría así como me sonrió a mí el día que te conocí. ♥
No comments:
Post a Comment